Ciclo Agro – Impacto socioeconómico del cambio climático en la argentina

Ciclo Agro – Impacto socioeconómico del cambio climático en la argentina

El martes 14 de septiembre se realizó un nuevo encuentro de este Ciclo en el que la apertura estuvo a cargo del Ing. Pablo Bereciartúa, Presidente del CAI, y la moderación del ciclo a cargo del Ing. Agr. Héctor Huergo. En esta oportunidad el orador principal fue el Lic. Esteban Otto Thomasz, Director del Programa de Investigación en Valuación de la Vulnerabilidad Socio Económica del Riesgo Climático, (UBA).

“El Cambio Climático es una de las principales agendas que están tomando forma a nivel global y creo que es un gran desafío para la Argentina”, dijo Bereciartúa en el inicio de esta charla y agregó: “Estamos a poco tiempo de una de las Cumbres que va a ser la COP 26 y lo hacemos atravesando esta pandemia, que lo que hizo en muchos aspectos es reformular agendas y a esa agenda vincularla con la economía y las inversiones, con las estrategias de desarrollo. Y en el CAI lo estamos tratando desde distintas ópticas. Y en ese sentido estamos pensando en organizar, para el mes de noviembre, una semana sobre la agenda del Hidrógeno para el desarrollo de la Argentina. En la reunión de hoy podremos ver la variabilidad y el impacto que el Cambio Climático tiene sobre la macroeconomía Argentina y especialmente sobre uno de los sectores principales del país que es el Agro. Hay que entender la amenaza que significa el cambio climático, para poder empezar a verlo como una posibilidad de cambio de paradigma, para poder pensar planes y proyectos en eso que aparece como una oportunidad para la Argentina”.

El Ing. Agr. Héctor Huergo, señaló que “esta conferencia es un punto crucial en vistas de la conferencia mundial que se viene con el objetivo de que todos los países comiencen a trabajar en cómo combatir el Cambio Climático y que se debe hacer frente a este desafío”.

El Lic. Thomasz, inició su presentación con un estado de situación. “Entre 2003 y 2020 el perfil exportador de la Argentina, entre manufacturas y productos primarios de origen agropecuario se concentraron en casi el 60% del valor exportado, el promedio anual está en el promedio de los U$S 60 mil millones y llegando a picos de hasta el 70%. Si analizamos en el extenso territorio agropecuario, solamente la soja representa el 30%, es decir un solo complejo se encuentra sembrado en 17 millones de hectáreas que equivalen a 50 millones de toneladas. En cuanto al maíz, tenemos 7 millones de hectáreas sembradas con un rinde de 50 millones de toneladas. Toda esta producción está expuesta al cambio climático, por ejemplo las marcadas sequías del 2009 y 2008 y la del 2012 que fue la peor hasta el momento ya que produjo, como todas, una pérdida de producción muy grande. A valores de dólar hoy, las pérdidas producidas por esas sequías alcanzan los U$S 6 mil millones, en caso de sequía severa, o de mil millones de dólares en caso de una sequía moderada”, explicó.

Bereciartúa, planteó una solución posible para atenuar las sequias, por ejemplo. Se refirió al ya proyectado Canal Continental, que recorrería desde Córdoba hacia el sur hasta Santa Rosa, en La Pampa y que además permitiría transportar mercaderías hasta el Puerto de Bahía Blanca. Y estimó su costo en unos U$S 700 millones en una primera instancia.

“La Argentina es un territorio tan grande y diferentes que los fenómenos de sequías e inundaciones son distintos a lo largo del territorio y afectan de maneras distintas”, señaló Bereciartúa y agregó: “Eso va de la necesidad, creo yo, de que la Argentina vuelva a generar embalses, uno  se está llevando adelante en San Juan, lo que le permite a esa provincia lo que se llama seguridad hídrica. Lo mismo deberíamos hacer, y estamos muy demorados en eso, con los ríos patagónicos. Hoy por ejemplo tenemos una seca histórica, por ejemplo, en el Río Colorado”, contó.

“Lo que dicen los especialista- señaló Thomasz- es que el cambio climático, o sea los aumentos de la temperatura y sus efectos sobre la hidrología, están actualmente incidiendo en un aumento de la frecuencia de eventos climáticos extremos. Es decir que se da esta recurrencia más pronunciada de sequías cada vez más extremas y más seguidas y de inundaciones de la misma forma. Diez años atrás esto no estaba tan claro hoy sí, todo esto está vinculado con el cambio climático”, expresó.

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