Primer encuentro del ciclo “Ingeniería y Cata de Vinos” en el CAI: la ciberseguridad en foco

El pasado 7 de agosto, el Salón Aisiks del Centro Argentino de Ingenieros (CAI) fue escenario del primer encuentro del ciclo Ingeniería y Cata de Vinos, con la ciberseguridad como eje central de la jornada. La actividad fue organizada por la Comisión de Tecnología, Innovación y Transformación Digital, presidida por Marina Rosso Siverino.
La disertación estuvo a cargo de la Ing. Olga Cavalli, decana de la Facultad de Defensa Nacional y cofundadora y directora de la Escuela Sur de Gobernanza de Internet (SSIG) y ARGENSIG, quien presentó un panorama global y regional sobre los desafíos actuales de la seguridad informática.
El ciberespacio: un terreno en disputa
Cavalli describió un mundo en el que aproximadamente el 70% de la población tiene acceso a Internet, al que se suman millones de dispositivos conectados en el marco del Internet de las Cosas (IoT). Este ecosistema interconectado —personas, organizaciones y objetos— se convierte en un blanco potencial para múltiples tipos de ataques cibernéticos, como phishing, malware, ransomware y ataques de denegación de servicio distribuida (DDoS).
Las amenazas provienen de múltiples orígenes: Estados, grupos terroristas, hacktivistas, ciberdelincuentes especializados e incluso empleados descontentos. Cavalli citó al ex presidente del Comité de Inteligencia del Congreso de Estados Unidos, Mike Rogers: “Existen dos tipos de organizaciones: las que han sido hackeadas y las que lo fueron, pero aún no lo saben”.
El factor humano, la primera línea de defensa
La especialista remarcó que el factor humano sigue siendo decisivo en la habilitación de ciberataques. Entre las principales debilidades mencionó:
- Uso de contraseñas poco seguras.
- Escasa inversión en concientización y capacitación.
- Percepción errónea de los riesgos reales.
- Prioridad a la confianza personal por encima de los protocolos de seguridad.
Inteligencia Artificial: herramienta de ataque y defensa
Uno de los puntos destacados de la exposición fue el papel creciente de la Inteligencia Artificial (IA), utilizada tanto para potenciar ataques como para fortalecer defensas.
Aplicaciones ofensivas de la IA en ciberataques:
- Automatización y sofisticación de ataques (fuerza bruta).
- Personalización de ataques mediante malware o ingeniería social.
- Evasión de sistemas de seguridad.
- Phishing y fraudes más persuasivos.
- Robo de información sensible mediante análisis masivo de datos.
Aplicaciones defensivas de la IA en ciberseguridad:
- Detección temprana de anomalías.
- Predicción y prevención de tácticas delictivas.
- Automatización de respuestas ante incidentes.
- Análisis forense digital acelerado.
Panorama regional de políticas públicas
En el plano local, Cavalli destacó la implementación de la Segunda Estrategia Nacional de Ciberseguridad, que define lineamientos para la protección del ciberespacio, los sistemas del Estado y los servicios esenciales.
Además, presentó un recorrido por las principales estrategias en América Latina:
- Chile: Política Nacional de Ciberseguridad 2023-2028, creación de la Agencia Nacional de Ciberseguridad (ANCI) y CSIRT nacional.
- Brasil: nueva política de ciberseguridad para fortalecer las defensas nacionales y proteger infraestructura crítica.
- Colombia: proyectos de ley para una agencia nacional cibernética y avances en marcos normativos.
- México: creación de la Agencia Nacional de Transformación Digital, con un área de ciberseguridad.
- Panamá: Estrategia Nacional de Ciberseguridad 2021-2024 con foco en actualización legal y cooperación internacional.
- Paraguay: Plan Nacional de Ciberseguridad para coordinar políticas y fomentar un entorno digital seguro.
- Venezuela: Plan Nacional de Ciberseguridad y Ciberdefensa vigente desde 2016.
- El Salvador: elaboración de su primera estrategia nacional de ciberseguridad.
El encuentro dejó en claro que la ciberseguridad no es solo un desafío tecnológico, sino también humano, organizacional y estratégico. Con un ciberespacio cada vez más interconectado y amenazado, la combinación de educación, protocolos claros y tecnologías avanzadas como la IA será clave para construir entornos digitales más seguros y resilientes.