Este Ciclo, organizado por JóvenesCAI, realizó su segunda edición. En la primera jornada Henry y Decentraland fueron las startups protagonistas. Pablo Bereciartúa, presidente del Centro Argentino de Ingenieros (CAI), abrió el encuentro. “Cuando uno habla de la nueva economía, habla de las empresas, de las que usan tecnología y crean empleos de calidad. Este ciclo del CAI tiene el foco en buscar, encontrar y mostrar cuáles son las empresas más innovadoras que se están conformando en el país”, afirmó y anticipó que el ciclo, continuará en 2022 aunque “con un encuentro más importante que potencie a las empresas innovadoras y de base tecnológica desde la Argentina”, dijo.

Agustina Yornet, product manager de Caravelo, ofició de moderadora y se refirió a la necesidad de contar con talento para responder a la alta demanda de perfiles con habilidades tecnológicas y consideró que resulta prioritario “conectarse con los principales hubs tecnológicos. Más que como realización personal, en la Argentina buscamos crear talento con una calidad similar”. Y agregó que “la demanda es más grande que la oferta y a nivel mundial, se está invirtiendo mucho más en tecnología y la pandemia acentuó ese problema en el país. Estamos perdiendo un montón del poco talento que hay en la Argentina”, advirtió.

Carlos Cazorla, de la comisión Jóvenes CAI, dio inicio formal al encuentro y presentó a las startups: “Henry es la primera academia de programación on line donde su modelo de negocios comienza con la educación con costo 0 y el estudiante empieza a pagar cuando consigue trabajo, pues esto es la clave para la democratización del acceso”, comentó.

Luz Borchardt, co-fundadora de Henry, destacó que,“a lo largo de su carrera, siempre notó la falta de talento calificado, de equipos de tecnología. Empezamos a estudiar el problema y aplicamos a Y Combinator, la aceleradora de start ups más grande del mundo, que decidió apoyar el proyecto”.

Sofía Clark, Brand Lead en el equipo de adquisition de Henry, dio cifras de este mercado, y señaló que“en 2020, hubo 1 millón de posiciones abiertas en América latina y solo 100.000 graduados afines a estas posiciones. Nos dimos cuenta de que la falta de talento calificado era muy grande y la brecha era enorme. No alcanza solo con educación de calidad sino que esta debe estar al alcance de todos”, sentenció. Y agregó que Henry se gestiona mediante el acuerdo de ingresos compartidos (AIC), es decir, que quienes se capacitan allí pagan una vez que consigue trabajo, como modo de democratizar el acceso al conocimiento.

Luego, fue el turno de Decentraland, un mundo virtual basado en blockchain, y Nicolás Earnshaw, developer experience manager de la startup, se refirió a la idea del “metaverso”, término que comenzó a conocerse en el mundo digital, para afirmar que, de alguna manera, “ya vivimos en mundos virtuales”.

Detalló aspectos de Decentraland, y aseguró que, “estamos creando una parte del contenido que va a formar parte de este metaverso”. Se refirió, por ello, a la necesidad de descentralizar determinados aspectos dentro de una plataforma, por más que genere dudas. Y explicó el rol de blockchain en este escenario como “una herramienta para poder evolucionar en este sentido” y profundizó sobre su valor, al igual que sobre las Organizaciones Autónomas Descentralizadas, conocidas como DAO.