En la Biblioteca Luis A. Huergo se encontró un documento, de enorme valor documental, escrito por el autor argentino de “El Túnel” y “Sobre Héroes y Tumbas”, que pasará a formar parte del Archivo Histórico. Se trata de un artículo científico escrito por Ernesto Sábato, en el mismo año (1945) en que publicó su primer libro de ensayos, “Uno y el Universo”, en el cuál criticó, de acuerdo a su mirada, la aparente neutralidad moral de la ciencia.
El documento, titulado “El concepto de temperatura en la termodinámica fenomenológica”, fue publicado en Buenos Aires, en la Revista de la Unión Matemática Argentina, Volumen X, N°. 4 y que es posible consultarlo en la Web de la publicación periódica
El texto, publicado como separata, tiene una dedicatoria del propio Sábato; y en sus agradecimientos, está dedicado a dos físicos teóricos que aportaron correcciones y sugerencias a su trabajo académico:, se trata de Enrique Gaviola y Guido Beck, quienes prestigiaron a la ciencia argentina con sus investigaciones.
Cabe destacar, y a su vez le otorga otra dimensión al documento, que Enrique Gaviola, graduado como físico en la Universidad de Berlín (luego de recibirse de Agrimensor en la Universidad de La Plata en 1922), formó parte, ni más ni menos, que del selecto grupo de trabajo de Albert Einstein. A tal punto que el propio Einstein solicitó a Gaviola, y a un grupo de eminencias (, el 22 de junio de 1948), su adhesión al llamado “Manifiesto de Chicago”, o “Manifiesto de los Nobel”, en el que se alertaba a la humanidad acerca de los peligros que implicaba el uso de la energía nuclear en sus aplicaciones bélicas.
Además de esto, Gaviola, tuvo como compañeros de trabajos a 23 premios Nobel de ciencia en toda su carrera profesional, lo que lo convierte en un verdadero referente nacional de la astrofísica mundial, siendo considerado, en 1998, entre los 20 mejores del siglo XX.
Por su parte, Guido Beck, checoslovaco, cursó estudios en la Universidad de Viena y publicó su tesis doctoral sobre la teoría de los campos gravitatorios, en 1925. Fue invitado por Gaviola para desarrollar un programa de investigación de física teórica en Argentina, allí se dedicó a la docencia en el Instituto Balseiro, donde fue profesor entre otros de Mario Bunge y el propio Ernesto Sábato.
El documento podrá consultarse previa solicitud por correo electrónico: biblioteca@cai.org.ar