El proyecto de ampliación de la Línea H de subterráneos recibió a una comitiva integrada por miembros del Centro Argentino de Ingenieros.

El día martes 26 de agosto se organizó una visita al tramo norte de la obra de ampliación de la Línea H del subte, desarrollada por Techint E&C, en consorcio con Dycasa. Al llegar al obrador, los invitados fueron recibidos por el Ministro de Desarrollo Urbano de la Ciudad de Buenos Aires, Daniel Chain, quien introdujo a la charla técnica posterior, a cargo de Julio Comoglio, Project Manager de la UTE.

Una vez comenzada la recorrida, en compañía del Ingeniero Alberto Di Maio, director de la obra, y de Marcelo Garibaldi, profesional encargado del tramo Norte, el mundo del subte se abrió a los invitados, para conocimiento de detalles que no suelen estar al alcance de todos. Actualmente trabajan en el proyecto 730 colaboradores, y se prevé como próximo hito completar a mediados de 2015 la primera etapa del tramo Norte, que comprende las estaciones Córdoba, Santa Fe y Las Heras, el túnel que las vincula y la subestación eléctrica rectificadora.

Justamente, la visita se desarrolló en lo que será la última estación nombrada (bajo la Plaza Mitre, en Recoleta), donde, en primera instancia, se pudo observar cómo los operarios habían finalizado un tramo de excavación, para empezar a revestir las paredes con la primera capa de hormigón. Contrariamente a lo realizado en las obras de ampliación de la línea B, cuyos trabajos se realizaron con pozos verticales, este proyecto cuenta con tres rampas de acceso, a través de las cuales se accede a los túneles, como también ofician de camino para la extracción de tierra. El excavado en cavernas también fue presenciado por los invitados: con máquinas excavadores, se ataca frontalmente, originando “escalones” sobre los que las máquinas van avanzando, para luego ir cavando hacia los costados y hacia abajo, a un ritmo de entre cuatro y cinco metros de longitud por día, en virtud de que unas 1200 personas trabajando en doble turno todos los días, con 60 frentes de ejecución en el horario diurno y 17 en el nocturno.

La obra demandará un gasto de 530 millones de dólares y redondeará 842.000 metros cúbicos de excavaciones, de los cuales ya se concretaron 680.000. A la fecha, el porcentaje de avance en la obra es del 22%, previendo que en mayo próximo se deberían finalizar dos estaciones y los talleres en el tramo Sur de la obra, en Parque Patricios, como también debería estar terminada, en julio, la estación Santa Fe, de 24 metros de longitud. Mientras que el plazo de entrega de la obras en la zona Sur (estaciones Sáenz y Pompeya) se prevé para abril de 2017, con casi 13 kilómetros de vías que beneficiarán a más de 300.000 usuarios.

El promedio de altura de los túneles cavados varía, según el segmento, entre 18 y 20 metros bajo tierra. ¿Por qué esa cifra? El método de excavación, denominado Buenos Aires Reformado, implica que la profundidad bajo el nivel del suelo sea la misma que el diámetro que tendrá el túnel. La parte más alta, por caso, es justamente donde estará la estación Las Heras, dado que allí habrá oficinas de administración.

Aunque la previsión de tiempos es alentadora, los encargados de la obra asumen que los mayores retrasos se dieron por dificultades lógicas: en la zona de la futura estación Santa Fe, el túnel tuvo que ser excavado por debajo de la traza de la Línea D, a la altura de su estación Pueyrredón. Y no sólo eso: antes de llegar a lo que será la estación Córdoba sucedió lo mismo, pero con un caño maestro de la empresa AySa como obstáculo. Pruebas superadas, que demuestran la capacidad de los profesionales argentinos.