Según el estudio, se puede prescindir totalmente del gas y los peligros que éste conlleva, reduciendo su alto costo y la contaminación propia como derivado de combustibles fósiles. Además, Couceyro sugiere la incorporación de un doble circuito hidráulico para alimentar las mochilas de los inodoros con agua reciclada de duchas y lavarropas, aduciendo que el agua potable es cara y escasa en el mundo como para usarla en barridos residuales.