Visita virtual a la Planta Depuradora Norte de AySA
El viernes 16 de abril se realizó, a través de la Plataforma Webex, la primera visita virtual del año a la Planta Depuradora Norte de la empresa AySA en la cual los asistentes del CAI fueron acompañados por Martín Gorbalán, estudiante avanzado de Ingeniería química de la UTN, y Gabriel Mansilla, estudiante avanzado de electromecánica de la UNGS, ambos de la oficina técnica de la empresa, quienes brindaron detalladas explicaciones de cada sector de la recorrida y mostraron filminas e imágenes en vivo de diferentes sectores de la planta en pleno trabajo.
El Ingeniero Roberto Massa, Presidente del Departamento Técnico del CAI, realizó la apertura de la visita virtual y anticipó que será la primera de varias que realizará el CAI, e invitó a los presentes a participar del CAI y del Departamento técnico.
Enseguida le dio paso a Gabriel Mansilla quien inició la visita contando que la Planta Depuradora Norte de AySA, está ubicada en la localidad de San Fernando, Provincia de Buenos Aires, y brinda servicios a los partidos de San Isidro y Tigre. Contó que la planta fue inaugurada en diciembre de 1998, en primera instancia, y que luego se completó su operatividad a partir de febrero de 2014. Agregó que el caudal pico que se trata es de 2.700 metros cúbicos por segundo, cuenta con 57 empleados y el líquido que allí se trata beneficia a 462 mil habitantes, utilizando un consumo de 842.425 kw de energía por mes. Además se realizan 700 muestras en laboratorio y unos 2000 análisis mensuales de los 134 mil metros cúbicos tratados por día.
Mostró un ejemplo de cómo llega el líquido a sus piletas y cómo, luego de un análisis por módulo se realizan una serie de estudios químicos y luego sale a la planta para ser tratado. En el video se pudieron observar las distintas zonas donde se realizan las diversas actividades de depuración del líquido antes de ser tratados. Se mostró la fosa de grueso, de un diámetro de 9 metros y una profundidad de 15 metros con un volumen de 950 metros cúbicos, ingresando unos 1,5 metros cúbicos por segundo, y se pudo observar cómo se tratan los residuos gruesos, según contó, y como se realiza la separación de los éstos a través de una serie de grandes filtros.
Luego pasa a las cinco bombas de elevación y a un anillo de carga en el que se realiza un análisis de PH y conductividad y pasa a las rejas finas donde se encuentran los barredores para realizar el desarenado y desengrasado del líquido. Cada uno de estos se recogen y se vuelcan en amplios volquetes. Y el líquido sigue paso a los decantadores primarios, unos grandes piletones, donde se lo mantiene estanco por dos horas para que los sólidos decanten en el fondo, y con los enormes barredores se saca toda esa materia y se la envía a una tolva. Estos piletones tienen un diámetro de 43 metros y un volumen de 4.400 metros cúbicos. En este tramo se pudo ver, a través de un colaborador que tomó imágenes en vivo de este proceso, como es esta operación desde esas piletas.
Luego se mostraron las cámaras de aireación, en el área biológica, compuesta por 8 módulos que reciben unos 3.350 metros cúbicos y donde el líquido permanece 4 horas, y a través de este mecanismo se le inyecta aire, a través de las cámaras de burbuja fina. Este es un punto crítico del trabajo de depuración, explicó, que se van controlando a cada hora. Y mostró un video, en vivo desde esa área, donde se vacían estas cámaras de aireación
El siguiente paso es el del clarificador, en el cuál se realiza el tratamiento del líquido y donde este permanece por dos horas. Se trata de 8 unidades y se realiza la succión del lodo biológico. Enseguida Verónica, desde otra zona de la planta, mostró en vivo los clarificadores y el efluente tratado, como sale al cuerpo vertedor. En este tramo, se pudo observar, la imagen del canal de salida por donde fluye el líquido tratado y limpio hacia la siguiente área.
Más tarde en el proceso mostraron los espesadores de lodos primarios, en el área de tratamiento de los residuos, en dos unidades cilíndricas de 4 metros de alto y 17 de diámetro que trata unos 960 metros cúbicos que captura el 92% de materiales sólidos y es bombeado hacia las cámaras de lodo mixto. Se las llaman flotador y allí se le inyecta aire comprimido para que estas se unan con el lodo y soltarlas al exterior. La cámara muestra en vivo como funciona este espesador.
En el Digestor y área de calderas, que son dos, se tratan los lodos durante 21 días y se le hace un tratamiento térmico, generando el biogás. Ese biogás es almacenado en un gasómetro que retiene unos 1.040 metros cúbicos de volumen, y que está construido de poliéster con recubrimiento de PVC.
Finalmente lo lodos llegan a las cámaras centrífugas, donde se le inyectan polímeros con el fin de quitar el líquido al lodo, la dosis es de 2 gramos por líquido, y se logra una sequedad del 23% aproximadamente. A través de un video se mostró cómo funciona esta cámara, que dispone, al finalizar, el barro con la consistencia de una plastilina, ejemplificó. Los residuos y subproductos equivalen a 82 toneladas x mes, unos 89.500 Nm cúbicos por mes y los biosólidos en 1.150 toneladas por mes. Al finalizar la presentación, varios de los asistentes a la visita virtual realizaron algunas preguntas.
Uno de los presentes preguntó si hay un plan para ampliar la planta y Gabriel Mansilla explicó que justamente está planificado hacerlo a futuro. Otro quiso saber que se hace con los barros, y explicó que se hace Landfarming, un proceso de tratamiento de residuos ex situ que se realiza en la zona superior del suelo o en celdas de biotratamiento. Los suelos, sedimentos o lodos contaminados se transportan al sitio de cultivo, se mezclan con la superficie del suelo y se voltean periódicamente para airear la mezcla.
Cuáles son los microorganismos que decantan, preguntó otro de los asistentes. “Son todos eucariotas: metazoos, son grupos sin categoría taxonómica de animales pluricelulares constituidos por células diferenciadas y agrupadas en tejidos y órganos; y protozoos”, respondió. Los protozoos son organismos microscópicos, unicelulares protista; heterótrofos, fagótrofos, depredadores o detritívoros, a veces mixótrofos; que viven en ambientes húmedos o directamente en medios acuáticos, ya sean aguas saladas o aguas dulces, y como parásitos de otros seres vivos.
También otro asistente quiso saber para qué se usa el biosólido. “Es para Landfarming, que se lo lleva una empresa, Biotec, una tercerizada que es operador de residuos industriales, no especiales, y residuos especiales, con servicios de transporte y tratamiento por biodegradación.
Uno de los presentes preguntó. ¿Qué pasa si cae un ave a las pileta?. “Creo que no nos daríamos cuenta, ya que no altera el proceso. No contamina, como si lo podrían hacer, por ejemplo, biocarburos que contaminan y alteran el proceso”, finalizó.